En el barrio de Colegiales, calle General Enrique Martínez 825, existió hasta 1950, una sencilla casita en la que viviera hasta su fallecimiento Frank Brown, una figura descollante dentro del teatro y el circo iniciales. Había nacido en Brighton, Ingraterra, en 1958 y su padre se había destacado como notable «clown».
En 1884 llegó a Buenos Aires y trabajó con gran éxito. Actuó en el circo de la familia Podestá y luego viajó a Africa y la India, ya casado con la «ecuyere» Rosita de la Plata, su querida esposa. Los niñoslo amaban por su especial caráter y simpatía. Este «Rey de los Payasos», se retiró en 1926 a su casa de Colegiales. Allí lo visitó en 1926 un periódico que comentara: «Una casita de esas que se echan un poco atrás para dar cabida a un jardinillo. Rosas y genarios muy amorosamente ciudados. El timbre hace ladrar a un perro, que se abalanza contra la balaustrada» y sigue un amable reportaje a ese anciano de cabellos blancos y rostro sonrosado, que sonríe sin cesar.
El bondadoso artista, paradigma de todos los que tal arte se dedican, sembrando alegría, falleció en esa vivienda el 9 de abril de 1943. La casa aquella ya no existe y ha sido reemplazada por un edificio de departamentos, pero por allí está la alegría de un hombre bueno que mucho amó a los pequeños.
Fuente: La antigua Chacarita de los Colegiales – Diego A Del Pino